Las favelas en Brasil

Favela es el término (portugués) utilizado en Brasil para los barrios de miseria y pobreza. Río tiene cientos de favelas y algunas de ellas son ciudades enormes con estrictas normas internas y códigos sociales. Los primeros asentamientos eran barrios africanos y se iniciaron durante el siglo XVIII. Con los años, los esclavos negros liberados sin tierra y sin trabajo se mudaron a los suburbios de la ciudad y los asentamientos se convirtieron en enormes favelas. Durante los años 70 surgieron nuevas favelas con el éxodo rural, muchas personas abandonaron la zona rural y llegaron a la ciudad en busca de oportunidades de empleo.
Las favelas de Río están étnicamente mezcladas. Los problemas económicos y la exclusión social hacen realmente difícil para la gente a salir de la favela y obtener un mejor estilo de vida. Aunque la pobreza, la violencia y la exclusión social predominan en las favelas de Río, la mayoría de los residentes trabajan duro por su dinero y con trabajos decentes. Las favelas están asentadas en las colinas que rodean la ciudad y sufren de frecuentes deslizamientos de tierra durante las fuertes lluvias; las calles son estrechas y mal mantenidas, lo que dificulta la circulación de vehículos. Las casas están construidas con chapa, una mezcla de arcilla y barro, y las tierras están ocupadas ilegalmente.

Algunos habitantes de las favelas están involucrados con el negocio de la droga como la cocaína u otras sustancias. Por lo tanto, las favelas han sido dominadas por los cárteles de la droga que han formado organizaciones criminales preparadas con armas modernas para defenderse de la policía o de otros delincuentes. Los carteles de la droga "garantizan" la seguridad en las favelas y establecen los códigos sociales. Es muy difícil para los policías entrar en algunas favelas, por lo que normalmente no se involucran con los problemas internos.

Las enormes favelas de Río se ubican próximas a los barrios más prósperos y lugares turísticos. Las favelas son un testimonio de la desigual distribución de la riqueza en el país, ya que 34% de la población de Brasil vive por debajo de la línea de pobreza.